Autor: Juan Felipe Pinzón García
Una de las estrategias más importantes a la hora de buscar trabajo es tener un currículum llamativo para el mercado laboral. Este currículo, sin embargo, no sólo debe ser atractivo, sino que también debe contener información esencial como son los logros obtenidos, experiencia profesional y académica, y sobre todo, un perfil profesional que oriente a un empleador sobre nuestra trayectoria laboral.
Este perfil profesional es básicamente un párrafo donde se describe el recorrido profesional y las competencias y habilidades de un candidato, junto con las funciones que esta persona puede y quiere realizar en un futuro. Esto, aunque parezca básico para muchas personas, para otras no lo es, y existen un sinnúmero de “hojas de vida” de candidatos con buena formación y experiencia, que muchas veces son descartadas por no tener perfil profesional.
El perfil profesional es importante porque es el gancho para que un empleador continúe leyendo nuestro currículum. Dentro de este perfil se debe escribir las actividades laborales que hemos realizado, que queremos realizar, las que no gustaría hacer y para las que se tiene capacidad. Siempre demostrando cuál son nuestras inclinaciones y preferencias laborales.
Algunos consejos para definir en forma atractiva un perfil profesional son:
Hacer mención de nuestras competencias y habilidades. A la hora de escribir nuestra orientación profesional, no hay que olvidar describir algunas de nuestras características, habilidades y competencias básicas. Es importante recordar que podemos modificar cada una de estas, según cada oferta de empleo, de modo que nuestras experiencias y competencias se enfoquen hacia el área de trabajo donde nos estamos postulando.
No hay que olvidar que debemos tener habilidades esenciales para la vacante a la que se aspira, así como no debemos omitir incluir competencias generales como trabajo en equipo, liderazgo, pro actividad, entre otras.
Brevedad. Un perfil profesional no debe ser mayor a dos párrafos, se recomienda escribir aproximadamente 60 palabras como máximo, ya que el exceso de información es muchas veces contradictorio en una hoja de vida.
Resaltar nuestra experiencia profesional. Con este punto nos referimos a que se debe destacar en todo momento y de manera concisa las funciones que hemos desempeñado en el pasado, complementándolas con las competencias y habilidades que más dominamos, con esto lograremos hacer más atractivo nuestro perfil profesional.
Citar dominio de liderazgo. Adicional a las competencias y habilidades naturales de cada profesión, es recomendable incluir aptitudes gerenciales y de manejo de grupos, de modo que nos mostremos como candidatos aptos en todo aspecto, revelando el dominio de competencias importantes como el trabajo en equipo, liderazgo y el desempeño en áreas administrativas, habilidades que todas las empresas, quieren tener en sus trabajadores.
Variación del perfil profesional según la vacante. Al encontrar una vacante, debemos pensar en las competencias y habilidades primordiales que busca el empleador. Luego, pensemos en aquellas que como aspirantes poseemos y enfoquémosla dentro de nuestro perfil profesional hacia el objetivo.
Recordemos que el perfil profesional es la carta de presentación de nuestro currículum, por lo que, redactarlo de manera atractiva y acertada puede marcar la diferencia. Con estos sencillos consejos, podremos enfocar nuestra búsqueda de empleo y tener mayor probabilidad de tener un proceso de ubicación laboral exitoso.
Brivé historias de éxito.
Artículo original de empleos.com